INFORME NACIONAL DE DESARROLLO HUMANO: CUBA 2019
PRESENTACIÓN DEL PNUD
Un nuevo esfuerzo desarrollado entre el Centro de Investigaciones de la Economía Mundial (CIEM) y el Programa de la Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) ha dado a la luz el 4to Informe Nacional sobre Desarrollo Humano, en esta ocasión titulado: Ascenso a la raíz. La perspectiva local del Desarrollo Humano en Cuba. Este documento contribuye de manera significativa a abordar el bienestar de las personas desde una mirada multidimensional y a ubicarlas en el centro de los procesos de desarrollo con un enfoque sostenible.
Con esto, el reporte hace suyo el espíritu de los informes sobre Desarrollo Humano del PNUD —que desde 1990 abordan las opciones de las personas más allá de sus ingresos e incluye la riqueza de la vida humana— y de la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible, que promueve una nueva visión holística. El informe también forma parte de las iniciativas que desarrolla la Oficina del PNUD en Cuba para apoyar el avance hacia los ODS desde los territorios, y que pone a disposición del sistema de las Naciones Unidas.
"Ascenso a la raíz" considera que cada sitio tiene una manera particular de construir sus relaciones y prácticas sociales, y dispone de potencialidades naturales, económicas, sociales y culturales específicas, factibles de ser puestas en valor. A la vez, centra el análisis en los municipios, como espacios para la innovación y la construcción de alianzas para el desarrollo humano sostenible. Como su nombre lo indica, ascender en el camino del desarrollo requiere una mirada particular e inclusiva del ámbito local, base esencial en cualquier proceso que persiga el bienestar presente y futuro. Solo desde esta raíz, y con ella como base, será posible alcanzar la cima.
La publicación también aporta a la reflexión crítica y documentada sobre el debate internacional y nacional en torno al desarrollo territorial y su articulación con las estrategias nacionales y globales; y al mismo tiempo evidencia el camino recorrido por actores cubanos, con sus experiencias y aprendizajes, capacidades y necesidades. Las iniciativas locales enriquecen las intervenciones tradicionales, contribuyen a reducir desigualdades y movilizan recursos. Esta reflexión resulta esencial en el contexto cubano actual que sitúa al municipio como pieza clave en el Plan Nacional de Desarrollo hasta el 2030 (PNDES 2030) y la Estrategia Económica y Social.
Dos importantes innovaciones resaltan en este reporte. La primera, referida al cómputo del Índice de Desarrollo Humano para todos los municipios del país, superando los anteriores informes (1996, 1999 y 2003) que solo midieron el ámbito provincial. La segunda, haber incluido por primera vez en el cálculo del IDH la dimensión ambiental, lo que representa un aporte al debate global sobre la medición del desarrollo de manera multidimensional y sostenible, en correspondencia con los objetivos del PNUD. Ambos aportes fueron el resultado de una intensa búsqueda de información, que contó con el respaldo de la Oficina Nacional de Estadísticas e Información y sus oficinas territoriales.
El proceso de levantamiento de datos, más allá de las mediciones, arrojó una importante conclusión: lo impostergable de fortalecer y diversificar la estadística local. Los municipios y provincias requieren una estadística renovada que refleje la realidad, avances y necesidades del territorio, e incorpore la visión multidimensional en la medición. Todo ello para facilitar la toma de decisiones efectiva e informada.
Entre sus principales mensajes, el informe nos destaca una evolución social por encima del desempeño económico, fundamentalmente en los niveles provinciales y municipales, cuyo comportamiento responde esencialmente a los programas nacionales; la persistencia de diferencias en los niveles de desarrollo entre provincias y entre municipios de una misma provincia; la relación aún dependiente entre el avance de un territorio y los procesos nacionales de inversión; el insuficiente aprovechamiento de los recursos endógenos territoriales; y la persistencia de deformaciones estructurales a nivel local, que requerirán del acompañamiento nacional para ser superadas.
De particular relevancia se destaca la alianza entre las universidades y los gobiernos locales en apoyo a procesos de análisis propositivo, a la gestión de la información, así como a la comunicación y la innovación, que promueven resultados de nuevo tipo a favor del desarrollo territorial.
Ascenso a la raíz es el resultado del intenso trabajo de un amplio número de investigadores y académicos, liderados por el Centro de Investigaciones de la Economía Mundial (CIEM), con la participación de la Universidad de La Habana —Facultades de Economía, Geografía y Comunicación—, el Centro de Estudios de la Economía Cubana (CEEC), el Centro de Estudios de la Administración Pública (CEAP) y la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (FLACSO); así como representantes de los Ministerios de Economía y Planificación (MEP), de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente (CITMA), y de Cultura (MINCULT); y también, de territorios cubanos y sus Universidades provinciales. Una mención especial a la Agencia Suiza para el Desarrollo y la Cooperación (COSUDE), socia de larga data del PNUD, comprometida con la promoción del desarrollo local y su medición, quien también ha brindado su apoyo a esta publicación; y al equipo de la Oficina del PNUD en Cuba, que ha acompañado cada paso de este proceso. Nuestro agradecimiento al Ministerio del Comercio Exterior y la Inversión Extranjera (MINCEX), por su facilitación y respaldo.
Cuando este informe estaba en proceso de revisión, un nuevo factor irrumpió en la vida global, nacional y territorial: la pandemia de la COVID-19. Su profundo impacto en el desarrollo social y económico, sus efectos también diferenciados a nivel territorial, no podían ser soslayados. Es por esto que el informe ha incluido un apéndice dedicado a este tema, conscientes todos de que aún hay mucho por estudiar.
Esperamos que este nuevo informe contribuya a generar una visión más integrada del desarrollo, basada en procesos inclusivos, con la participación de actores diversos y de la ciudadanía, que hagan suyo el principio de no dejar a nadie atrás y se enfoquen estratégicamente en un futuro sostenible. Es interés de los autores que los análisis realizados sirvan de insumos a la implementación del Plan Nacional de Desarrollo Económico y Social hasta el 2030 y a la política pública cubana, inmersa hoy en promover un proyecto de nación en el que el espacio territorial sea esencial.
Tal como asciende la savia en los árboles, les invitamos a adentrarse en el análisis de la raíz del desarrollo, y avanzar en su entendimiento, para así estar en mejores condiciones de propiciar el camino al progreso multidimensional y sostenible. Disfruten de su lectura.
Maribel Gutiérrez
Representante Residente del PNUD